Thursday, February 4, 2016

Pastor Díez: “Tenemos que seguir abriendo más hogares de Remar”

El fundador y presidente de  Remar (Asociación Cristiana Benéfica de Rehabilitación y Reinserción de Marginados) y de la Iglesia Evangélica Cuerpo de Cristo, pastor Miguel Díez Álvarez,  visitó La Paz en el marco del X Congreso Anual de Remar Bolivia, organización que lleva 19 años  en el país.

Remar Bolivia cuenta con 21 hogares de protección y centros  en diferentes departamentos -según  la organización-, en donde viven 656 personas distribuidas por edades y necesidades, desde bebés hasta familias. También da un servicio asistencial alimentario a otros 400 niños.

Díez habla  sobre el presente, los planes de la asociación en Bolivia y las críticas que se han hecho a su trabajo a lo largo de los años.

¿Cada cuánto tiempo visita Bolivia y cuál es la importancia  del país para Remar?

Vengo todos los años; solamente creo que falté un año, amo mucho Bolivia. De los 70 países en los que está Remar, Bolivia es de los preferidos. Primero, por la gente que es muy humilde y sencilla, claro que hay de todo; pero nos han acogido con cariño. Es un país hermoso, creo que tiene la tierra menos contaminada del mundo porque no ha abusado de químicos. Pero además porque aquí hay  mucha necesidad y, bueno,  mucho que hacer y por eso venimos.


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Freddy Barragán y cortesía Remar-Bolivia/ El fundador  y presidente
de Remar, Pastor Miguel Díez durante la cena de Remar en La Paz.


¿Cómo se han desarrollado las actividades de Remar Bolivia en estos  19 años?

Hemos crecido mucho ayudando a los niños de la calle. Empezamos con las "cholitas”, con los niños dándoles de comer y hemos abierto hogares. Tenemos hogares de niños abandonados, de niñas abusadas que han quedado embarazadas y  tienen sus bebés, en Santa Cruz; y otros para alcohólicos y adictos que son centros para rehabilitación. Estamos enseñando formación profesional a los que se rehabilitan, es una tarea muy amplia en donde intentamos cubrir la necesidad que surja. Hay mucha gente que llama a nuestra puerta y, bueno,  la puerta está siempre abierta para ellos. Esa es nuestra labor.  

¿De dónde se  consiguen los fondos  para mantener los hogares y las actividades?

Pues practicando cada día el lema "ora y trabaja”. Tenemos que trabajar duro, tocar puertas, y también producir, restaurar y reciclar. Somos maniacos del reciclaje, queremos respetar la creación de Dios.  Somos muy ecológicos y reciclamos todo, lo que se puede aprovechar lo recuperamos: plásticos, cartones, metales y muebles. Las personas, antes de tirarlos, nos  donan objetos  y nosotros los reciclamos, luego los vendemos o  los usamos en los hogares y centros. También fabricamos,  tenemos carpinterías de madera, cerrajerías, una fábrica de detergentes para que ellos aprendan a ganarse el pan. Al principio, hay que darles el pescado, los recursos para que puedan producir y después  aprenden a pescar. Es lo que hemos hecho desde España, en  estos años hemos enviado unos 80 a 100 contenedores  de ayuda humanitaria -con maquinaria, vehículos, ropa, entre otros-  y por supuesto algunos millones de euros para Bolivia.


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El taller  de carpintería de Remar, que funciona
con maquinaria donada por el Japón.

¿Qué tan importante  es el evangelio y la fe  para las personas que están en los centros?


Las personas son enfermas porque vivimos en un mundo egoísta, cruel, perverso y de maldad, y las familias se desestructuran. Se produce una deformación en el alma de las personas. La  medicina perfecta es la fe y el amor, cuando las personas descubren cuál es el sentido de su vida, que no estamos aquí por casualidad, que hay esperanza y un futuro en el cielo, eso les revela que son criaturas de Dios.

¿Los rehabilitados pasan a formar parte de la Iglesia Cuerpo de Cristo?


Tristemente no. Alrededor de un 25% de las personas que entran a rehabilitarse lo consiguen, el 75% igual puede marcharse al día siguiente de que entraron porque esto no es una cárcel, se pueden ir cuando quieran.  De ese 25%, yo calculo que sólo un 8% se quedan (como parte de la iglesia). En España hemos atendido a 160 mil drogadictos, más de 50.000 fueron rehabilitados y sólo 3.000 continúan sirviendo al Señor  con nosotros. Mujeres abandonadas encuentran esposo en este ministerio, los solteros rehabilitados forman familias y miles de matrimonios rotos  han vuelto a ser unidos en el amor del Señor.

¿Qué planes tiene Remar Bolivia para el futuro?


Seguiremos  transformando vidas.  Mientras haya gente necesitada siempre habrá mucho trabajo  y eso no va a faltar porque el mundo se está pervirtiendo en el   egoísmo, en el amor al dinero y esa insolidadaridad hace que haya una competencia tan feroz que los débiles van quedando marginados. Tenemos que seguir abriendo más hogares de Remar porque, curiosamente, la droga aumenta y eso lleva a la violencia. Queremos atender a los presos de las cárceles, como hacemos en muchos países, para que cuando salgan en libertad no vuelvan al círculo de delincuencia.     

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Productos de  la línea de  detergentes Remar Sol.  

¿Qué opina sobre las críticas de que la institución es una secta?


El problema es que cuando alguien rechaza algo tiene que tener  fundamentos y pruebas. Primero, en países donde el catolicismo es muy fuerte, como nosotros no somos católicos, se nos ataca, por una manera u otra. Segundo, los que se van de Remar robando son muchos y  los que se van sin rehabilitarse en lugar de aceptar su error tienen que descargar su culpa en alguien o algo. Si las críticas hubieran tenido fundamento habrían ido a la justicia y no tenemos ningún caso judicial ni hemos tenido.  Hace poco en Santa Cruz, unos invasores quisieron quitarnos nuestra propiedad que ha sido comprada y empezaron con calumnias. Que si íbamos a llevar drogadictos ahí, que si iban a robar.  O sea, a la gente le parece muy bien ayudar a los necesitados, pero no aquí, sino allá en la selva. Y presentaron falsos documentos a las autoridades y se dio con la verdad. Cometemos errores, pero no son de la institución, sino de alguna persona que está dentro que ha venido con las manos sucias y no se las ha limpiado.

Como les abrimos la puerta, pues también pueden tener libertad para hacer el mal y el ministerio no tiene la culpa de que algunos no quieran cambiar. Si alguna vez cometemos errores, me pongo de rodillas y digo: soy falible.

¿Reciben apoyo de instituciones  bolivianas?


Las mismas instituciones nos mandan a las personas necesitadas. Tenemos acuerdos de colaboración y a veces incluso nos han donado algún vehículo que han expropiado a los  narcos. Dinero generalmente no nos dan porque lo destinan a otros fines.

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Taller de  cerrajería, donde trabajan personas en rehabilitación.


¿Y en los otros 69 países?


Ahora con los refugiados, por ejemplo,  está sucediendo algo impresionante. Estamos dando de comer a 12.000 refugiados al día en cuatro países: Serbia, Croacia, Grecia y Rumania, y antes también en Hungría, como consecuencia de que fuimos inmediatamente a ayudar a la gente y fuimos los primeros. Nos están donando "trailers” y "trailers” de alimento de una manera increíble. También están las instituciones que no pueden ayudar porque no tienen las manos que tenemos nosotros, que contamos con un ejército de voluntarios. Nosotros queremos que el hambriento coma y el desnudo se vista.
Sobre  Remar
Emprendimientos Remar Bolivia tiene cuatro fábricas  de productos de limpieza, cuatro talleres de chocolatería artesanal, 12 carpas solares, dos talleres de carpintería, dos talleres de cerrajería, dos granjas agropecuarias, un servicio de transporte y mudanzas y una productora audiovisual.
Cobertura Remar Bolivia cuenta con 21 casas hogares-centros de rehabilitación ubicados en diez municipios de seis departamentos del país.
Programas Los programas de Remar Bolivia, según información de la institución,   incluyen la rehabilitación de personas con adicciones, protección a la mujer, comedores sociales benéficos, atención a niños, jóvenes y familias.
Carpas solares El proyecto agricultura en carpas solares sirve para dotar las despensas de los centros, casas de acogida y comedores  sociales que están a cargo de Remar Bolivia. El trabajo en las carpas es parte de la terapia ocupacional de los internos que están en la primera fase del  proceso de rehabilitación.

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