Con 19 años de labor en el país, la organización Rehabilitación y Reinserción de Marginados (Remar) que atiende a seres humanos en situación de drogas, alcohol, maltrato y abandono, rehabilitó a más de diez mil personas en seis departamentos. En esa línea, sus representantes afirmaron que proyectan la creación de nuevos centros.
En Bolivia, la organización atiende a niñas y adolescentes víctimas de maltrato y abuso sexual, niños de la calle, adultos con adicciones y personas con enfermedades terminales. A todos ellos les ofrece ayuda integral con alimentos, vivienda, vestimenta, medicina, educación y terapia, según cada caso.
INTERVENCIÓN
Remar, a nivel nacional, tiene 21 centros de asistencia social y emprendimientos, seis centros de rehabilitación se encargan de rehabilitar a las personas con adicción, asimismo, existen también casas-hogar que atienden a mujeres víctimas de violencia intrafamiliar, jóvenes, niños y niñas en riego, además de comedores benéficos, explicó en entrevista con EL DIARIO, el representante de Remar en Bolivia, John Ugalde.
“Cada hogar tiene la capacidad para aproximadamente 70 personas según la problemática; apoyamos a las personas en situación de vulnerabilidad y acogemos a aquellos que desean un cambio en su vida”, dijo.
DESEMPEÑO
Actualmente en Bolivia, están en proceso de rehabilitación al menos 490 personas. Además, a través del proyecto denominado “Sin hambre se aprende mejor”, en los cuatro comedores solidarios a nivel nacional, se da una ración alimenticia a más de 500 niños de La Paz, El Alto, Alto San Pedro y en los departamentos de Oruro, Cochabamba y Santa Cruz, asimismo, se proyecta crear un centro en el Beni. “La alimentación se prepara con un 80 por ciento personal de Remar y un 20 por voluntarios”, dijo.
El proceso de rehabilitación comienza con la decisión de la persona de superar su adicción. Pero, posteriormente se trabaja en la desintoxicación y la terapia ocupacional y espiritual. Remar es dependiente de la Iglesia Cuerpo de Cristo de España.
REHABILITACIÓN
La organización tiene la capacidad de atender también a personas en fase de desintoxicación, dentro del proceso de rehabilitación y reinserción con el apoyo de un grupo de profesionales que se encargan de apoyar el proceso.
“Trabajamos en las tres áreas: lo espiritual, físico y lo emocional y hay personas que tienen heridas en el alma, por falta de amor, complejos, rechazo, resentimiento y falta de perdón. Buscamos atender la salud emocional y si no hay este proceso no existe la rehabilitación”, dijo Ugalde.
VÍCTIMAS DE VIOLENCIA
La organización atiende también a mujeres y madres víctimas de maltrato. “Existen muchas mujeres maltratadas que tocan nuestras puertas, tenemos que abrir más casas de acogida, la realidad del consumo de alcohol es lo que desencadena todo”, comentó.
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