La necesidad de formular en Bolivia una política de Estado que involucre tanto a la minería estatal, privada y cooperativizada fue formulada en la Mesa Redonda que tuvo lugar la semana pasada, bajo el auspicio de la Fundación Jubileo.
De acuerdo con la ley Minera, en abril concluye el plazo para las concesiones mineras y su adecuación a la nueva normativa. Este tema fue parte del análisis de la reunión, en la que participaron el presidente de Comibol, José Pimentel; exviceministro del área, Pedro Mariovo; Héctor Córdova, experto de la Fundación Jubileo; además de Rodi Balanza, profesor de la Carrera de Metalurgia de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA).
INFORMALIDAD
En ese marco salieron a la luz varias opiniones sobre la situación de la minería en Bolivia. El exviceministro Mariovo dijo que el sector se desenvuelve entre la formalidad, informalidad y la clandestinidad, por lo que propuso la necesidad de que el Gobierno diseñe una política integral, que incorpore, entre otros temas, el daño al medioambiente, que está provocando esta actividad con graves consecuencias para el país.
CONFLICTIVIDAD
Mariovo destacó, por ejemplo, que el cooperativismo siempre se desenvolvió en conflicto, como ocurrió con los luctuosos sucesos ocurridos en Caracollo, donde perdió la vida el exviceministro Rodolfo Illanes. Sostuvo que sus intereses a menudo son excluyentes con los intereses del país. “Ellos piensan solamente en sus objetivos”, dijo.
COMIBOL
El presidente de Comibol destacó que las cooperativas al haberse localizado en parajes marginales, siempre enfrentarán problemas de carácter técnico y otros sobre la preservación del medioambiente. Balanza dijo, por su parte, que –en general– las cooperativas no tienen relación con la universidad cuando los problemas que enfrentan son de carácter técnico.
ADECUACIÓN NORMATIVA
En torno a la adecuación de las concesiones mineras a la nueva normativa del sector, el titular de Comibol expresó sus dudas sobre esta situación, debido a la complejidad de las exigencias técnicas. “Les exigen formalizarse a las cooperativas, que deben presentar para tal caso un plan de trabajo y proyectos de exploración. La gran mayoría de ellas no tiene capacidad para responder a estos requisitos, porque son de sobrevivencia, subsisten el día a día”, sostuvo. “Es un plan muy idealista, no creo que cumplan”, observó.
GRAN MINERÍA
En el caso de la gran minería, Córdova manifestó que la transnacional Sumitomo, que administra la empresa San Cristóbal, exporta concentrados donde también pueden encontrarse minerales, tales como Cadmio, Indio, Manganeso y otros, que tienen alto valor en los países industrializados y que de los cuales Bolivia no obtiene beneficios. Dijo que la citada transnacional sigue descargando aguas tóxicas, afectando los cultivos agrícolas de la región.
ORO
Mariovo destacó que, en este ámbito, se tienen también grupos de barranquilleros o dueños de barcazas, que organizados explotan oro en varias cuencas del noroeste del país, como en el norte del departamento de La Paz, donde el grado de informalidad es muy elevado. Como el Estado no les brinda asistencia técnica, recursos ni inversiones, estas actividades se desenvuelven sin control, sostuvo.
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