El gobierno de la República de Italia concede a su par de Bolivia un crédito de tres millones de euros y una donación de 60 mil euros para el financiamiento del programa “Colaboración al proceso de mejoramiento de esquemas de conservación y de las estrategias de valoración económica y social de los recursos fitogenéticos de la agrobiodiversidad”.
El ente ejecutor de este crédito será el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras (MDRyT), a través del Instituto Nacional de Innovación Agropecuaria y Forestal (INIAF), y tiene el objetivo de apoyar en la gestión eficiente y efectiva, en el uso sostenible y conservación de los recursos genéticos de la agrobiodiversidad en Tierras Bajas y su valorización económica y social, en el ámbito del Sistema Nacional de Recursos Genéticos y ejecutando un sistema institucional de Comunicación para el Desarrollo que fortalezca los procesos de apropiación de conocimientos en las instituciones del Estado y en el área rural.
El proyecto está focalizado en tres ecoregiones de las zonas bajas de Bolivia: Chaco, Chiquitanía, Amazonía, y es complementario al Proyecto de Innovación y Servicios Agrícolas (PISA), del Banco Mundial, cuyas actividades de conservación de recursos genéticos están enfocadas a la Región Andina Tropical.
El acto de suscripción del acuerdo de financiamiento se realizó en salones de la Cancillería del Estado Plurinacional de Bolivia este jueves 27 de noviembre, las rúbricas estuvieron a cargo del canciller David Choquehuanca y el embajador de Italia en Bolivia, Plácido Vigo.
En su intervención el embajador Vigo manifestó: “(en Bolivia) hay especies animales, botánicas, agropecuarias con un contenido inestimable que se tiene que desarrollar, cuidar y preservar (…); en total tenemos 27 proyectos para toda Bolivia por un valor superior a los 106 millones de dólares”.
“Muchos recursos genéticos están en riesgo, durante siglos los pueblos indígenas de Los Andes los han preservado celosamente; necesitamos valorar, recuperar esos saberes y proteger lo que todavía nos queda”, enfatizó el canciller Choquehuanca.
Por su parte, el director general ejecutivo del INIAF, Hans Mercado, precisó: “Bolivia ocupa el 0,2% de la superficie del planeta, sin embargo, alberga más del 60% de la diversidad del planeta, eso hace que esté considerada dentro de los 10 países megadiversos en recursos genéticos. Esto hace que como país tengamos la responsabilidad del manejo adecuado de estos recursos”.
Para su implementación inicialmente se definirá tres municipios uno en cada una de las áreas de intervención, que dispongan de al menos 100 ha para construir los bancos de germoplasma, realizar investigaciones regionales integrando recursos genéticos con los nueve programas nacionales de investigación del INIAF, y que dispongan de las siguientes facilidades: acceso, electricidad, teléfono e internet, estar sobre un camino estable durante el año, y relativamente cerca a la capital del municipio.
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