El hogar San José viene trabajando desde hace ocho años con niños discapacitados, física y sensorialmente. Poco a poco esta institución ha logrado formarse y ahora cuenta con una infraestructura, ubicada en el kilómetro 29 de la carretera al norte, donde los niños y jóvenes pueden beneficiarse de un servicio especializado para atender sus necesidades de salud, educación y desarrollo integral. El director de este hogar es el hermano José Alirio Henao Giraldo, colombiano de nacimiento y Protagonista de hoy, quien motivado por las necesidades de los niños y jóvenes decide instaurar este establecimiento junto a una fundación "Alirio Henao Hogar San José". El hermano Alirio llegó a Bolivia, como religioso, hace 21 años y comenzó a trabajar en el hogar Teresa de los Andes. Después de 14 años desde Colombia, le avisan de un nuevo traslado, pero él motivado por el cariño de la tierra cruceña, decide dejar la sotana y quedarse para siempre en Santa Cruz.
¿Cómo nace la idea de crear el hogar?
A.H.: Al trabajar en el hogar Teresa de los Andes, he visto la necesidad que existe en Bolivia de atender a los niños que sufren algún tipo de discapacidad. Si bien es cierto que existen centros donde tratan estas enfermedades, los mismos solo funcionan de día, y algunos son caros. Por ello es que se quiere atender a la mayoría de los niños, lo malo es a veces los costos no nos permiten tener el espacio suficiente para poder recibir más niños con discapacidad.
¿Fue difícil poder formar el hogar San José?
A.H.: Al principio fue difícil, porque me dio tristeza poder desprenderme del hogar Teresa de los Andes. Pero hubo gente que me apoyó y me dijo: "No hermano usted no se va, porque es un cruceño más, y ya veremos como lo ayudamos para formar un nuevo hogar". Y así es que Elías Ortiz, cónsul de Colombia, nos dona una casa por la sede de Blooming y comenzamos con el proyecto. Al principio comenzamos con 10 niños, fue difícil, porque eran niños muy pequeños, de uno a cinco años. Luego de un tiempo, nos venimos a esta casa-quinta, donde estamos instalados hace dos años, y es aquí que continuamos nuestra tarea.
¿Cuáles son los objetivos que tiene el hogar?
A.H.: El principal, es que los niños con discapacidad sean reconocidos con los mismos derechos que tiene cualquier persona, entre comillas, normal. Que no sean tratados como niños diferentes, sino que sean tratados con los mismos derechos.
¿Qué ayudas se brindan dentro del hogar?
A.H.: A los niños se les da fisioterapia, rincones lúdicos, psicopedagogía, terapias ocupacionales, multiterapia, ademas de comida, ropa, medicamentos y cama. Dentro del hogar, se cuenta con un equipo multidisciplinario, el mismo está constituido por cuatro enfermeras, un fisioterapeuta, un médico pediatra, un psicopedagogo, un joven que realiza las ludoterapias y cinco mamás sustitutas, que se encargan de bañarlos y darles de comer a los más pequeños.
¿Cuánto cuesta mantener un niño?
A.H.: A lo largo de este tiempo he hecho un cálculo y el mismo me indicó que se gasta por niño cerca de Bs 3.000 mensuales. Eso sin contar el gasto extra que significa llevarlos al hospital cada vez que se enferman. El hogar San José ha atendido a 31 niños, pero nuestra aspiración es llegar a los 60 niños.
¿Cuáles son los pros y contras que han afrontado como institución?
A.H.: Uno de los contras es que el lugar donde estamos en la actualidad es demasiado lejos y por ello muy poca gente nos visita. Antes cuando estábamos por la sede de Blooming, no nos faltaban las donaciones. Ahora la Gobernación nos ayuda con becas alimenticias y el municipio cruceño con un aporte anual, el mismo no es suficiente y necesitamos más aportes para poder sustentarnos.
¿Sienten que los gobiernos los ayudan?
A.H.: Existe ayuda, pero no es como la que debería ser. Sabemos que se invierte, en su gran mayoría en obras quedando así relegada la ayuda para las personas discapacitadas a un segundo plano. Lo ideal es que las obras y la ayuda a las instituciones vayan juntas, porque los niños discapacitados tiene derechos.
¿Qué proyectos tienen a corto y largo plazo?
A.H.: Queremos construir una panadería. Nosotros hacemos pan los lunes y jueves, los primeros los vendemos a las personas de la fundación y el jueves lo hacemos para los niños del hogar. Queremos para más adelante vender el pan en puestos fijos, para así hacer al hogar autosustentable. Sé que se puede hacer, porque tengo la experiencia del hogar Santa Teresa de los Andes, donde teníamos la panadería y una granja. Esperemos que todo se de a su debido tiempo.
'Muchos niños con discapacidad son abandonados en las clínicas y en las calles'.
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