Labor de aldeas SOS busca evitar la desintegración familiar

Con la finalidad de evitar la desintegración familiar, Aldeas Infantiles SOS Oruro trabaja en programas para fortalecer al núcleo fundamental de la sociedad, proteger los derechos de los niños y defensa en centros de acogida temporales y permanentes, según manifestó el coordinador de esta institución Luis Tirado.

Indicó que para que este trabajo sea efectivo, se debe realizar una alianza estratégica con las instituciones gubernamentales, los medios de comunicación y la población.

Tirado mencionó que actualmente se está implementando el programa piloto de fortalecimiento familiar dirigido a familias en riesgo y contención, donde se amparan a los niños de forma diaria con enseñanzas didácticas que fortalecen sus valores.

El director de este programa, Bernardo Flores, expresó: "No se trata de una guardería, es un centro donde los niños vienen a aprender aspectos integrales que formaran su carácter, lo estamos encarando como una fase piloto que posteriormente vamos a traspasarla al gobierno municipal y departamental una idea donde autoridades y población debemos involucrarnos".

Dentro del programa de acogimiento familiar, Tirado explicó que actualmente se trabaja con 110 niños que por una serie de circunstancias han perdido el cuidado parental, que están distribuidos en 14 centros familiares que trabajan en la institución, uno en el barrio San José y recientemente otro en Caracollo.

"Además tenemos 80 jóvenes que están en proceso de profesionalización, es decir, que están terminando el bachillerato por una parte, otros incluso ya están tomando una carrera técnica o universitaria, también más de 140 jóvenes adultos ya viven de manera independiente muchos de ellos con su propia familia y con un trabajo estable", dijo el coordinador.

Manifestó que a través del trabajo profesional de los funcionarios de Aldeas Infantiles SOS Oruro, se va germinando una semilla que repercutirá en la transformación de la sociedad ya que los niños que salen de la institución son agentes de cambio, porque la formación que se les ha dado se tiene que traducir en una mejora de vida acorde a la sociedad.